Clases de yoga
La práctica de yoga puede convertirse en un proceso enriquecedor y profundo, potenciando el cultivo de una mente y un cuerpo sanos, centrados y en equilibrio. Las clases de yoga que ofrecemos en Presentia son un espacio de trabajo intenso y sanador a nivel físico y mental, muy beneficioso y en muchos casos necesario para profundizar en la práctica de meditación y mindfulness. Un cuerpo armonizado y en equilibrio es un buen vehículo para el cultivo de una mente plenamente consciente.
Las clases están pensadas para personas que quieran profundizar, avanzar o conocer por primera vez esta práctica milenaria, comprometiéndose a iniciar un proceso gradual de aprendizaje integral del yoga y sus diversas posturas, de modo que puedan recibir todos los beneficios que esta práctica aporta.
En la base de cada sesión estará el objetivo de cultivar una mente consciente y asentada en el momento presente, desarrollando grados cada vez mayores de conciencia corporal y conciencia en la respiración. Asimismo, habrá un importante trabajo con la respiración, que no sólo será utilizada como objeto de atención, sino que también será intencionalmente modificada mediante ejercicios de respiración (pranayamas) que forman parte de la práctica del yoga y nos ayudan a alcanzar estados de gran concentración, relajación y conciencia. Por último, las posturas de yoga y los diversos estiramientos y movimientos dinámicos que realizaremos serán parte central de cada sesión, desarrollando la fuerza, el equilibrio, la flexibilidad, y trabajando directamente con las articulaciones, órganos, glándulas del cuerpo, así como también con la manifestación más sutil y energética del cuerpo físico.
Siempre, en cada sesión, las instrucciones se ofrecen de tal manera que promueven una actitud de amabilidad y cuidado hacia el propio cuerpo, reforzando y enfatizando la esencia de la práctica del yoga, una práctica de cuidado y autoconocimiento, una práctica que requiere de atención y conciencia para realizarla adecuadamente, y no un simple ejercicio físico.
¿En qué consiste cada sesión?
Durante la hora y media de la sesión iremos desarrollando los ocho pasos de la práctica yóguica descritos por Patáñjali en su tratado clásico los Yoga- Sûtra:
Según su definición, «El Yoga se alcanza con la suspensión de las fluctuaciones mentales. Entonces acontece que el observador descansa en su propia naturaleza. De otra forma, la mente se identifica con sus fluctuaciones» (Patáñjali, siglo II a C).
La práctica yóguica se articula en ocho partes, «capaces todas juntas de disolver las impurezas mentales que nublan nuestro conocimiento y de aportar verdadero discernimiento».
Estas ocho partes son:
– Valores o actitudes para estar en armonía con el Universo.
– Valores o actitudes para estar en armonía contigo mismo-a.
– Ásanas: la postura física, pues el cuerpo representa el primer nivel en la concentración de la energía dispersa de la mente. El ásana requiere esfuerzo unido a suavidad, quietud unida a respiración rítmica, lucidez unida a interiorización, …
– Pranayama: el arte de respirar conscientemente y de regular las cuatro fases de la respiración: inhalación, pausa a pulmones llenos, exhalación y pausa a pulmones vacíos. Con el fin de dirigir nuestra atención y energía interna.
– Pratyahara: la purificación de los sentidos para la percepción del Aquí y Ahora a través de la Conciencia Testigo y el Antar Mouna (Silencio Interior).
– Samyama: la meditación yóguica y sus tres pasos en la concentración (Dharaná, Dhyana, Samadhi).
¿Quién lo imparte?
Carmen Viejo Heredero (Ahimsa), Licenciada en Ciencias de la Información y profesora de yoga titulada por la Yoga Vedanta Academy (Escuela de Sivananda) y por la Asociación Española de Practicantes de Yoga (Escuela de Manuel Morata). Colaboradora habitual de Yoga en Red y anteriormente de Yoga Journal España y Psicología Práctica. Organiza talleres intensivos y retiros de yoga mensualmente y en las vacaciones.
¿Hace falta tener experiencia previa?
No hace falta tener experiencia previa; las clases se adecuarán al nivel y a las condiciones de cada persona, y a la vez irán gradualmente aumentando el nivel y planteando mayores desafíos, siempre en armonía con las necesidades y capacidades del grupo y de cada persona.
¿Puedo practicar yoga si tengo alguna dolencia o problema físico?
El yoga puede ser muy beneficioso para aliviar y tratar complementariamente ciertas condiciones físicas, tales como dolores de espalda, escoliosis, tensión o dolor en las articulaciones, dolores de cabeza, migrañas, fatiga, insomnio, problemas digestivos. Si hay condiciones físicas más graves, en la medida en que no impidan realizar una práctica y que el médico autorice, la práctica de yoga puede ser un buen complemento. Si tu cuerpo está actualmente atravesando por alguna enfermedad o dificultad y tienes dudas, no dudes en contactarnos y preguntar.